Para MISEREOR cada proyecto individual es parte de una empresa mayor. En diálogo con sus contrapartes de África, Asia, Oceanía y América Latina se desarrollan visiones y objetivos sobre cómo apoyar eficientemente procesos sociales. MISEREOR complementa estos procesos a través de intercambio de experiencias, formación de redes y asesoría técnica adecuada, sobre temas tales como desarrollo urbano y rural, derechos humanos, salud, paz y muchos otros.
MISEREOR acompaña estrechamente a sus contrapartes y en caso necesario asesora sobre aspectos de administración y desarrollo organizativo.
Los principios básicos del trabajo de proyectos
Ayuda profesional necesita principios sólidos. Es por eso que MISEREOR examina cuidadosamente cada solicitud de apoyo en cuanto a los efectos esperados y su factibilidad.
Las intervenciones financiadas por MISEREOR deben satisfacer una serie de condiciones básicas. Dicho en términos técnicos ellas son subsidiarias, complementarias y temporarias. Esto significa que MISEREOR ayuda allí donde las personas e instituciones locales llegan al límite de sus posibilidades y dependen de ayuda externa. MISEREOR no asume en forma permanente tareas que son responsabilidad del Estado pero les recuerda a muchos gobiernos que su acción debe contribuir a combatir la pobreza. Por último las medidas están limitadas temporalmente, dado que la ayuda debe capacitar a los pobres para una vida autodeterminada y no dar lugar a nuevas dependencias.